Irritable, impasible, imbatible, imposible, locura, ojeras, voz rota, voz cortada, sueños desvaneciéndose entre palabras de caramelo que flotan sobre un mar de lágrimas.
Debería empezar a preocuparme por mi situación reciente.Lucha de gigantes abatiéndose como mil rectas de perfil, algo que quiero seguir recordando, pero poco a poco dudas que van surgiendo como esas gotas de agua que mancharon mi cara al intentar mirar las estrellas esa semana anterior.
Que tal vez él sea el culpable de todo o el culpable de nada, el culpable de que hoy me sienta como me sienta, porque en momentos me siento sola y en momentos me siento la persona mas abrazada de la historia de la naturaleza y el momento lineal.
Quiero seguir sintiendo y sentir cada momento más, en un mundo descomunal donde siento mi fragilidad, que es una pesadilla seguir con esta historia, con esta vida triste e infinita, con mis ojos mirando a un destino que no es el mío, algo demasiado para mis descansos, algo demasiado para mis sábados.
Noches improbables y tonterías que acaban en besos profundos, besos reales, besos sentidos, subiendo la temperatura a un nivel que ni el Sol habría podido detectar ¿entonces son estrellas lo que surgen dentro de mi? Dejémonos de sutilezas y cuentos de princesas.
No teníamos nada que perder, dos cuerpos revolcándose el uno con el otro en el asiento trasero, física, química y matemáticas mezcladas a la vez, aprobado seguro, matrícula de honor, nada obsceno, solo cuerpos jóvenes aprendiendo a vivir el tiempo perdido.
A veces me como la cabeza... me como la cabeza pensando que no tengo a nadie para echar un... rato.